Le conoce y sabe cómo explotar todo su potencial. Mancini, entrenador del Manchester City, ha pedido su fichaje.
Su nombre va de boca en boca, se cuela en todas las reuniones y llamadas que mantienen los directores técnicos de los principales clubs europeos. Zlatan Ibrahimovic está en el mercado. No de forma oficial, como se desprende de las palabras pronunciadas ayer por el vicepresidente Rafael Yuste –“Ibra está muy a gusto aquí y deseo que esté muchos más años haciendo goles porque está muy contento y nosotros muy satisfechos con él”–, pero es un secreto a voces que si al FC Barcelona le ponen un cheque con la cantidad que desea sobre la mesa (entre 45 y 50 millones de euros), la venta sería un hecho. Y el club que, hoy por hoy, suspira más por el sueco es el Manchester City.
El técnico de los ‘citizens’, el italiano Roberto Mancini, que ya tuvo al sueco bajo sus órdenes en el Inter de Milán, está ‘loco’ por hacerse con su fichaje. Considera que es la pieza angular de su nuevo proyecto y ya se ha puesto en contacto con él para informarle que sería muy bien recibido y que tendría todo el protagonismo ofensivo del equipo, como lo tuvo en sus anteriores equipos. Los contactos telefónicos entre ambos han sido regulares, por lo que Ibrahimovic está al corriente e informado de lo que le aguardaría con los ‘sky blues’.
Por otra parte, el jugador vería con buenos ojos lanzarse a una aventura como la inglesa después de haber probado campeonatos tan exigentes como el holandés, italiano y español, siempre culminados con éxito. Además, sus características físicas le ayudarían a una rápida integración al nuevo sistema de juego que tendría que afrontar de aterrizar en la Premier.
Igualmente, al jugador se le respetarían los emolumentos económicos que actualmente tiene pactados con el FC Barcelona, algo que el delantero exigiría en caso de tener que abandonar el Camp Nou.
Mancini, aunque tiene en su plantilla al togolés Emmanuel Adebayor, un jugador de características similares, quiere potenciar la vanguardia y ha pensado, además del ahora delantero barcelonista, en otro refuerzo: Edin Dzeko, del Wolfsburgo, cuya cotización en el mercado es de 25 millones de euros.
Todo apunta a que la historia va para largo. O que podría zanjarse cuando Pep Guardiola entre en escena y hable con el jugador cara a cara...
En cualquier caso, Ibrahimovic sigue de vacaciones en Estocolmo con su familia, donde el pasado invierno adquirió un nuevo domicilio, a la espera de acontecimientos relacionados con su futuro deportivo si los hubiera. Está permanentemente en contacto telefónico con su agente, Mino Raiola, que le informa de todo lo que acontece a su alrededor estos días.
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